Un año más, recurre a remanente de tesorería para equilibrar los números rojos y a 19 de junio de 2014, el remanente disponible en Zalla es de 2.169.694,33€ frente a unos 6 millones que se encontró, hace 3 años.

Estamos muy lejos de tener en el ejercicio 2013 un superávit de 4,5 millones como Javier Portillo quiere hacer creer en el último número de Zallainfo.

Y es que a Zalla Bai-Aralar le “bailan” los números rojos del 2013.Primero el alcalde nos presenta un decreto con un déficit de 866.790,27€ y posteriormente lo corrige por otro con un déficit de 769.107,91€.

Desde que Zalla Bai-Aralar gobierna, viene siendo una práctica habitual que los gastos superen en gran medida a los ingresos, lo que les ha obligado a acudir al remanente de tesorería en numerosas ocasiones.

Ya informamos que el 2012 se cerró con un déficit considerable, el 2013 exactamente igual y por lo que llevamos de 2014, se continúa por la misma línea ya que se recurre reiteradamente a dicho remanente. De esta manera, a 19 de junio de 2014 el remanente disponible en Zalla es de tan solo 2.169.694,33€ frente a unos 6 millones que había en2011-. Estos hechos demuestran que los presupuestos del 2012, 2013 y 2014 aprobados por el equipo de gobierno carecían de previsión, realismo y criterio.

En la previsión de que debíamos afrontar años venideros de crisis, la gestión anterior de EAJ/PNV dejó en las arcas municipales un remanente disponible de unos 6 millones de euros, remanente que nos ayudaría a afrontar estos años de crisis en nuestro pueblo y a paliar sus efectos sin que se viera minorada la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas.

A EAJ/PNV de Zalla nos preocupa que si Zalla Bai-Aralar sigue en esta línea de gasto y falta de ingresos, nuestro Ayuntamiento pasará de ser uno de los más saneados de Euskadi a estar en una delicada situación económica PUDIENDO VERSE COMPROMETIDOS PROYECTOS IMPORTANTES DE FUTURO PARA NUESTRO PUEBLO.

EAJ/PNV apostamos por trabajar para la mejora de calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas y entendemos que los recursos de los que disponíamos debieran haber sido invertidos en paliar la situación de crisis de las familias, potenciando la actividad local, aspecto del que solo percibimos apagones a diario, una cubierta en campo de paddle, otra en unos juegos infantiles y poco más.